Los Estados miembros de la Unión Europea deben investigar si han existido prisiones secretas de la CIA en sus territorios, según una resolución adoptada este martes en el Parlamento Europeo, que insta a Lituania, Polonia y Rumania a abrir o reanudar la investigación sobre las cárceles.

"Lituania, Polonia y Rumanía deben abrir o retomar investigaciones independientes sobre su supuesta colaboración con la CIA para que se mantuviera e interrogara a sospechosos de terrorismo en cárceles secretas en Europa", señaló un comunicado de prensa publicado en la web de la institución europea.

"Hay que hacer todo lo necesario para garantizar investigaciones rigurosas e independientes sobre lo que pasó y quién es el responsable", remarcó la eurodiputada francesa de Los Verdes Hélène Flautre, para quien "la imaginación de lo Estados miembros no tiene límite cuando se trata de esconder la verdad". Por ello, opina que "sólo se logrará romper este silencio mediante un enfoque coordinado a escala europea".

También la comisaria de Justicia, Viviane Reding, que participó en el debate, pidió a los países una investigación "en profundidad, independiente e imparcial para que se aclare la verdad".

Los eurodiputados condenaron asimismo que no se hayan revelado totalmente estos datos, y la incapacidad de los Estados miembros afectados para determinar si se produjeron violaciones de los derechos humanos.

La liberal holandesa Sophie Veld fue tajante al asegurar que "es muy desafortunado que gobiernos europeos se nieguen a asumir su responsabilidad y a pedir disculpas". Y es que "la eficacia de las medidas antiterroristas y el respeto de los derechos humanos no son incompatibles, sino que se refuerzan mutuamente", subrayó la popular francesa Michèle Striffler, que añadió que "en Europa no debe ser posible encarcelar a alguien en secreto sin un juicio previo".